Una de las cuestiones que más preocupan a los viajeros a la hora de programar y preparar su viaje a las Islas Griegas es cómo desplazarse, tanto dentro de las islas como para “saltar” de una isla a otra para sacarle el máximo partido a su expedición. Sin embargo, esta cuestión es mucho más sencilla de lo que se puede imaginar. Veamos cómo.
Moverse por una isla
Para moverse dentro de las islas, existen varias opciones. En primer lugar, suele haber una línea regular de autobuses con paradas en todos los puntos relevantes. Pero si se tiene un espíritu aventurero y se quiere aprovechar cada segundo para detenerse en un nuevo rincón, lo mejor es alquilar un coche. Además, este servicio no supone un coste elevado. Debe tenerse en cuenta que siempre será mejor un coche que una motocicleta, dado que en las islas suele soplar el viento y el coche resulta mucho más cómodo.
Desplazarse de una isla a otra
Si lo que se busca es trasladarse de una isla a otra, los ferris son la mejor alternativa. No solo porque no son muy caros, sino porque garantizan unas panorámicas perfectas que, a golpe de Polaroid, seguro que también se imprimirán en la memoria de los viajeros. Las compañías que más combinaciones ofrecen son BlueStar y HellenicSeaways. Si no se dispone de mucho tiempo -dado que los ferris pueden tardar hasta diez horas en llegar de una isla a otro- y el presupuesto es mayor, el avión es la otra opción, recomendándose especialmente las compañías Olimpicairy Hellenic Airways.